¡DEJA YA DE GARABATEAR!

¡Que no estoy haciendo garabatos! ¡Que estoy haciendo un Zentangle!

Seguro que en el colegio todos alguna vez hemos hecho alguno. Se trata de dibujos que van formándose de forma creativa con líneas y figuras, rellenando poco a poco la hoja de papel.

 

Es el ‘garabato’ de toda la vida. Pero basándonos en esa idea del garabato, nace el Zentangle, creando imágenes pero ya a partir de patrones.

 

Su creación no está preparada. Sólo hay que tener ganas de empezar y dejar que la mente vaya creando.

A diferencia del garabato, el método zentangle precisa de máxima concentración. Se trata de hacer una obra de arte.

Los fundadores de este método registrado, Robert y Thomas, vieron en esta actividad una gran fuente de meditación con muy pocas reglas a seguir.

Actualmente, se necesita certificado para ser profesor de Zentangle.

¿Qué materiales se necesitan? Para hacer un ‘auténtico’ Zentangle, se necesita material de primera calidad. Es decir, papel de primera calidad con un grosor y dimensiones determinadas, rotuladores negros calibrados, lápiz y difumino.

¿Cómo podemos hacer un Zentangle? En realidad, los expertos lo llamarían ‘dibujos inspirados en los zentangles’. Pues, vamos a ver unos vídeos donde queda más claro. En el primero vemos algunos patrones, y en el segundo cómo va dibujando.

(the ART gEEK)

(Dilip Patel)

Esta técnica tiene tantas posibilidades que se utiliza en centros educativos por su potencial para la estimulación de la creatividad.

Mucho en común con los mandalas: relajación, aumento de la concentración, estimulación de la inspiración y la creatividad…

 

Nosotros podemos empezar sencillamente por coger nuestro papel y lapiz, relajarnos, dejarnos llevar y ver donde nuestra creatividad nos guía.